RETRIBUCIÓN INMEDIATA: Según la doctrina Católica hay que rendir cuenta de todos nuestros actos inmediatamente después de la muerte. Dice Apocalípsis 20;15 " el que no se encontraba inscrito en el libro de la vida fue arrojado al lago de fuego" es decir quien no sumo méritos esta mal encaminado hacia la morada eterna, una doctrina que se mantiene vigente luego de dos milenios y poco más. Esta retribución inmediata de las obras de nuestra vida es la clave para entender semejante y pavoroso juicio, donde desfilara ante nuestros ojos atonicos toda nuestra vida, ya sean las cosas buenas como las malas, "Pues no hay nada oculto que no haya de ser manifiesto, ni secreto que no haya de ser conocido y salga a la luz". Lucas 8;17 sera implacable el señor en decir la verdad y nada más que la verdad de nuestra actuación, no cabra entonces lugar para escusas ya que a místicos de nuestra fe (Santa Brigida; Ver Aquí) se les a indicado que el alma frente al juez no hace sino asentir con la cabeza que esta de acuerdo con su verdad-de-vida.
Esta epifanía interior no es arbitraria de Dios, sino un acto de bondad para poder ver con
sus ojos (los de Dios) como realmente vivimos nuestra existencia. Abra tres lugares próximos al desenlace del juicio;
Así que se nos hace imperante vivir de acuerdo a los diez mandamientos de la ley de Dios usando como instrumentos de la Gracia los siete sacramentos de la Iglesia, que el Buen Dios nos lego para poder transitar este mar anchuroso de maldades. Abajo de esta posta les dejo un maravilloso sermón del Santo Cura de Ars sobre el mismo tema, que definitivamente no les dejara indiferente de esta terrible realidad, y termino diciendo, que Dios nos agarre confesados.
