Peregrinos del Absoluto - Templarios de Dios

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viernes, 24 de abril de 2009

La Parusía en la epístola de Bernabé


La verdadera santificación del sábado


Para hablar de Parusia santamente debemos dirigirnos confiadamente a la época apostólica. En dicha edad de oro, es en donde encontraremos la discusión teológica que dieron soporte a los benditos dogmas católicos occidentales-orientales en los que creemos. En esta oportunidad hablaremos de uno de los textos más antiguos y venerables de nuestra santa tradición, me refiero a la epístola de Bernabé.


Es muy llamativo la relación día-milenio que ponen de relieve los primeros padres. Sin este detalle seria imposible entender incluso la forma como esta estructurada el Credo apostólico, siendo que el verdadero teólogo debe acoplarse a la manera de pensar del verbo eterno de Dios en su narrativa bíblica, y no como hacen algunos hoy tratando de relativizar la fe.


Veamos el punto donde Bernabé nos habla del Sábado santo.

XV 1. Pasando a otro punto, también acerca del sábado, se escribe en el decálogo, es decir, en las diez palabras que habló Dios en el monte Sinaí a Moisés cara a cara: Y santificad el sábado del Señor con manos limpias y corazón puro. 2. Y en otro lugar dice: Si mis hijos guardaren el sábado, entonces pondré sobre ellos mi misericordia. 3. Del sábado habla al principio de la creación: E hizo Dios en seis días las obras de sus manos y las acabó en el día séptimo, y descansó en él y lo santificó.
4. Atended, hijos, qué quiere decir lo de: los acabó en seis días. Esto significa que en seis mil años consumará todas las cosas el Señor, pues un día es para Él mil años. Lo cual, Él mismo lo atestigua, diciendo: He aquí que el día del Señor será como mil años. Por lo tanto, hijos, en seis días, es decir, en los seis mil años, se consumarán todas las cosas.
5. Y descansó en el día séptimo. Esto quiere decir: Cuando venga su hijo y destruya el siglo del inicuo y juzgue a los impíos y mudare el sol, la luna y las estrellas, entonces descansará de verdad en el día séptimo.


Wow esta relación día-milenio es practicamente nula hoy por hoy. La razón es que hemos apostatado de la verdad, dejando de repetir con san Pedro en su carta: "Ustedes son una raza elegida, un reino de sacerdotes, una nación consagrada, un pueblo que Dios hizo suyo para proclamar sus maravillas; pues él los ha llamado de las tinieblas a su luz admirable" (1 Pedro 2,9). En cambio algunos creyentes hoy día ni siquiera saben desglosar el padre nuestro, ¿como esperar que hablen de las maravillas de Dios en semejantes condiciones? Creo que es en su tamaña gracia, que Pedro habla de la siguiente manera: "El fin de todas las cosas está cerca... Ha llegado el tiempo del juicio, y éste empieza por la casa de Dios" (1 Pedro 4-7; 4-17) iluminando en nuestro punto con estas palabras: "No olviden, hermanos, que ante el señor un día es como mil años y mil años son como un día" (2 Pedro 3,8) y aquí esta develada la gran verdad.


Sigue el relato de Bernabé:


6. Lo santificarás con manos limpias y corazón puro. Ahora, pues, si pensamos que pueda nadie santificar, sin ser puro de corazón, el día que santificó Dios mismo, nos equivocamos de todo en todo. 7. consiguientemente, entonces por nuestro descanso lo santificaremos de verdad, cuando, justificados nosotros mismos y en posesión ya de la promesa, seremos capaces de santificarlo; es decir, cuando ya no exista la iniquidad, sino que nos hayamos vuelto todos nuevos por el Señor, entonces, si, santificados primero nosotros, podremos santificar el día séptimo.

8. Por último, les dice: Vuestros novilunios y vuestros sábados no los aguanto. Mirad cómo dice: No me son aceptos vuestros sábados de ahora, sino el que yo he hecho, aquél en que, haciendo descansar todas las cosas, haré el principio de un día octavo, es decir, el principio de otro mundo. 9. Por eso justamente nosotros celebramos también el día octavo con regocijo, por ser día en que Jesús resucitó de entre los muertos y, después de manifestado, subió a los cielos.

La pregunta que queda es: ¿Estamos de las puertas del gran milenio apocalíptico?

Procuraremos responderlo en una próxima entrega.

microbitacora.blogspot.com

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