El Arzobispo de León, Mons. José Guadalupe Martín Rábago, pidió a la Secretaría de Salud federal y estatal, revisar el contenido de la cartilla de salud sexual distribuida a niños y adolescentes, y retirar las ya distribuidas, porque fomentan una sexualidad descontrolada a través del preservativo y la pastilla del día siguiente.
En declaraciones a la prensa, el Prelado indicó que la cartilla, repartida en junio, fomenta entre los jóvenes el hedonismo. Añadió que no solo los obispos han expresado su preocupación, sino también asociaciones de padres de familia. Recordó que la formación de los hijos es un derecho y un deber de los padres.
Mons. Martín Rábago advirtió que lo que se promueve en la cartilla es algo que afecta a todas las familias sin distingo de fe u opción. Por ello, pidió a las autoridades federales y estatales ser sensibles en este tema.
Solicitamos "que la cartilla se revise", se reelabore una cartilla para el nivel de la población a la que va dirigida, y que se recojan las que fueron distribuidas.
Mons. Martín Rábago señaló que la decisión de promover los métodos abortivos "como forma de educar sexualmente es totalmente indebido". "Ya hemos señalado muchas veces que el aborto es realmente un homicidio. Se le llama de una manera más elegante ‘interrupción del embarazo’ y demás, pero es eso (un homicidio)".
Con respecto al sida, el Prelado recordó que en países del África se ha cambiado de política, de distribución de preservativos a la promoción de la abstinencia y la fidelidad, logrando mejores resultados.
Asimismo, dijo que se debe comprobar que el reparto de preservativos ha ayudado a disminuir el número de embarazos adolescentes. "No se ha comprobado", advirtió.
"El uso de la sexualidad en tiempos demasiado prematuros distorsiona psicológicamente a la persona y la impide después para vivir una vida matrimonial en la fidelidad", afirmó. El Prelado indicó que el camino de la educación es el más difícil, pero el más adecuado y con mejores resultados.
